domingo, 7 de junio de 2009

La Crisálida*


Hoy 13 de Julio de 2007 me agarró una apachuchamiento marca ACME, efectivamente estoy cerrando muchísimas heridas viejas que me estaban acosando inconscientemente y de una forma o de otra, hacían que yo me “desviara” de mis deseos, ilusiones y sueños.
Hoy llego a la conclusión de que a mí de nada me sirve soñar si luego no dedico esfuerzos a llevar mis sueños a la realidad. También me doy cuenta que tengo la capacidad de hacerlo, modestia aparte o no, es así. Por otra parte, llego a la conclusión de que ya no quiero dar esa capacidad para los sueños de otros, porque he aprendido que les alimentas el ego y eso no es bueno; claro que me refiero a esos otros que lo piden. Aquellos que no lo piden son quienes quizás no se animan a llevar sus sueños a la realidad o se sienten pequeños y débiles, ellos son quienes más necesitan creer en sus sueños y que otros creamos en ellos, pues sus fines son nobles y buenos. Pero volviendo a MI tema, estoy cerrando cicatrices, haciéndole cirugía a mi alma y eso es muy removedor de dolores viejos que hacen mella en mi aquí y ahora.
Hay algo fuerte que me pasa: vivo una batalla, el viejo paradigma y el nuevo paradigma de Guadita se debaten en mi interior. Todo lo viejo conocido por mi se derrumba dando paso a lo nuevo, eso nuevo que hace años viene nutriendo mi interior, hoy está llegando el momento de romper la crisálida, está naciendo, viendo poco a poco la luz. Finalmente las semillas del alma plantadas en mi interior han germinado y los brotes están a punto de asomar en la tierra fértil de mi corazón1. Yo, como si no fuese parte de éste proceso de éste cambio y ésta transición, sufro y me asusto (respondiendo al viejo paradigma), me paralizo ante la sola idea de que mis sueños por primera vez en mi vida están siendo posibles en mi día a día. ¡Vaya paradoja! Es el miedo a lo desconocido, ya lo sé, sin embargo todavía no puedo evitar sentirlo. Siento como la balanza se inclina un poquito hacia el viejo paradigma para luego ir por el nuevo, así una y otra vez, día a día; la duda de cuál será el ganador no me abandona aunque bien se que el nuevo paradigma no nació para perecer, sin embargo yo sí nací en el viejo paradigma y me cuesta mucho abandonarlo. ¿Por qué? Simplemente porque los desapegos, junto con el perdón, son las transiciones más difíciles de atravesar.
Ya que mencioné el perdón quisiera explayarme un poquito en dicha acción, porque causalmente éste tema también está jugándose en mi vida. Efectivamente las viejas heridas que estoy cerrando se cosen con el hilo del perdón. “Si no olvido moriré” dice el amigo Ceratti en su tema “Perdonar es divino” del disco “Bocanada”, efectivamente si yo no logro perdonar viejos dolores y aspectos negativos míos y de otros que se sucedieron en el pasado, se dará en mi alma una muerte sin resurrección, una muerte definitiva, una desaparición, algo negativo y carente de sentido. Por otra parte, a través del perdón se encuentra la vida, una muerte pequeña, una muerte con vida después de la muerte, una transición haciala vida en el paraíso, ¿qué mejor que vivir un paraíso? Pero a las personas como yo nos cuesta soltar los recuerdos, sentimos como que nos desarraigamos; efectivamente hay una raíz que se está yendo, pero es la raíz de las malas hierbas y considero normal sentirse identificada con esto, auque yo no sea las malas hierbas que hay en mi corazón sí las tengo y me cuesta ver la realidad de que yo no soy eso y desmalezar mi corazón de los viejos dolores y traumas. Todos los recuerdos que me vuelven, están despidiéndose, con cada revisión de cada viejo dolor que vuelve siento un adiós en mi interior y el espacio que lo viejo desaloja da lugar a lo nuevo que penetra en mí. Siento como de a poco voy conectando con más personas que piensan, vivien y sienten como yo; gracias a Dios también estoy conectando con personas que ya están viviendo sus nuevos paradigmas desde hace tiempo y no es nada difícil para ellos vivir así. Para mí son un ejemplo, me dan esperanza, fuerza y fe para seguir creyendo que mis sueños de a poco se harán realidad.
Por mucho miedo que tenga, tengo plena fe en que algún día lograré llevar a cabo lo que siento que debo hacer, se que elegí un camino sinuoso y en cada vuelta del laberinto en que me metí sucumbo ante el miedo de no poder ver la luz... Sin embargo con los ojos de mi corazón se que allí está esperándome y que todo el tiempo del mundo está a mi disposición... Vaya desafío, creer en lo que no se puede ver con los ojos físicos ni con la vista de la razón; sólo creer intuitivamente en lo que el corazón ve con sus propios ojos, ¿es normal que sienta miedo? Claro que sí, estoy comenzando a funcionar según el nuevo paradigma y es lo desconocido lo que asusta.
Gracias a Dios estoy muy bien acompañada y eso me hace sentir más fuerte, soy conciente de mi fragilidad y soy conciente de que la dureza que aparento es sólo un mecanismo de defensa; también soy conciente que a medida que me apoye en mis debilidades comenzaré a ganar fuerza interior que en definitiva es la que cuenta, la de verdad.


Bueno, para ir cercando el final de lo que me propuse expresar, tengo un problema más que interesante: por primera vez en mi vida, desde que tengo memoria, no sé que quiero. Sí, estoy desorientada en lo laboral, el tema del sustento me tiene un tanto intranquila y me hace creer que mi futuro se pone negro. Y de verdad que se me está complicando el panorama financiero, sé que eventualmente volverá a fluir el dinero en mi vida, pero no logro encausar dicha fluidez. Hoy por hoy no me veo en ningún trabajo, no me veo ganando plata, ni me veo nada, es de terror, jamás me había pasado algo parecido. Estoy preocupada porque esta parte del viejo paradigma no es algo con lo que yo contaba para que desaparezca; mas a la luz de los últimos eventos de mi vida, estoy dándome cuenta que va a desaparecer, el tema es que no le he dado forma a mi nueva forma de “ganarme el pan” ya que no contaba con un cambio en éste área. Sí actualmente me aparecen “puntas” para trabajar en forma independiente y estoy un poco asustada porque si bien es algo que siempre desee, no me sentía (y no me siento) todavía preparada. La realidad es que hace ya casi un año que salí del sistema tradicional de empleo, digo por el año en negro que pasé con Cludius y hoy en día todo me llama a trabajar en forma independiente, a expandir mis horizontes y dejar que la vida me fluya. ¡Y me asusta! Pienso que crecí en la vieja escuela del ingreso mensual constante, al menos eso fue lo que me enseñaron mis padres y lo que vi como ejemplo en mi vida con ellos. Luego siguiendo el camino de mi propia alma, me la jugué y fui por más, un sueldo fijo más comisiones el resultado es que tenía un sueldo variable y nunca sabía con cuánto me iba a quedar para el siguiente mes hasta que cerraba el ciclo comisional; y no me fue mal y aprendí que eso requiere mayor esfuerzo. Hoy me encuentro ante el llamado de la independencia, la inevitable inseguridad de estar por cuenta propia... ¿No será mucho? Sin embargo, por el momento no me aparecen otras posibilidades concretas y estoy paralizada (literalmente) porque no me siento preparada para estar por mi cuenta. Realmente siento que ese vestido me queda muy grande. Por otra parte, tengo una mente muy despierta que no para de tirarme ideas y opciones para subsistir por cuenta propia y aunar mis esfuerzos en pos de concretar los objetivos que tengo: convertirme en psicóloga y colaborar con los procesos de sanacion de los seres que acudan a mi con ese fin.
En fin, lograré perdonar a los viejos dolores y sobre todo a quienes los causaron para poner un punto final a la vieja era, a la vieja Guada y disfrutaré de lo nuevo que venga con mi nueva vida.
Abrazando el cambio, convirtiéndome en el cambio, le pido a Dios que me guíe en cada paso que de porque estoy a oscuras y anhelo la luz, que así sea bajo la gracia y de manera perfecta para mi y para todos. Gracias Padre porque ya está hecho. Y sobre todo gracias Dios por hacer posible mi hoy, mi aquí y ahora, mi vida y mi ser tal como son; podré haber dicho muchas cosas sobre mi momento presente, pero la más válida, real y honesta es mi amor y agradecimiento a Dios.

Guada


Notas:
1) ”De la abundancia del corazón habla la boca” – Mt 12:34
*) Pupa (Editado de Wikipedia)
La pupa es el estado por el que pasan algunos insectos
en el curso de la metamorfosis que los lleva del estado de larva al de imago o adulto.
En el estado de pupa el insecto se oculta o encierra en una cápsula para protegerse mientras los órganos juveniles se reabsorben y el organismo adopta una estructura totalmente distinta.
Durante el estado de pupa, el insecto permanece inmóvil y no toma ninguna clase de alimento; progresivamente desarrolla
patas y alas, que no están presentes en la larva. El proceso puede llevar apenas un par de semanas, como en algunas mariposas, o servir adicionalmente como fase de reposo en la que el insecto espera que las condiciones ambientales se tornen favorables; algunas pupas pasan en esa forma todo el invierno, o los meses más cálidos en el trópico.




Crisálida
En los Lepidoptera, la pupa se denomina crisálida; las crisálidas (del
griego χρυσος, chrysos, "oro") están entre las formas más vistosas que puede adoptar una pupa, y al ser por lo común superficiales son probablemente el ejemplo más familiar. La mayoría de las crisálidas de mariposa se cuelgan durante todo el proceso de un pedúnculo sedoso producido por la oruga, y se ocultan entre el follaje para protegerse.
Las crisálidas de las
polillas, por el contrario, suelen ser oscuras y prefieren enterrarse en el suelo o envolverse en un capullo de material productos; el más famoso de estos capullos es el que produce Bombyx mori, el gusano de seda, formado por un larguísimo hilo de seda. En la eclosión, el insecto ya adulto rompe el capullo o lo disuelve excretando un líquido ad hoc.

13/07/2007


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